30 de abril de 2025
¿Alguna vez has querido acceder a un crédito para hacer crecer tu negocio o invertir en un proyecto personal, pero te has encontrado con una barrera? Tal vez, fue la falta de un fiador o de un respaldo que te permitiera dar ese paso. Aquí es donde entra una figura clave del mundo financiero: la garantía.
En palabras simples, una garantía es un compromiso que se entrega como respaldo al momento de asumir una obligación financiera, como un préstamo o un crédito. Es la forma en la que el banco o la entidad financiera se asegura de que tú cumplirás con lo pactado. Y si no puedes hacerlo, esa garantía se activa para cubrir la deuda.
Existen dos tipos de garantías que probablemente hayas escuchado:
Aquí se respalda el crédito con un bien, como una casa, un carro o incluso maquinaria.
Es cuando alguien más – por ejemplo, un amigo, un familiar o una entidad – se convierte en tu fiador y responde si tú no puedes pagar.
Pero, ¿qué pasa si no tienes un bien o una persona que pueda respaldarte? No te preocupes, aquí es donde aparecemos nosotros, ¡un gran aliado!: el Fondo Nacional de Garantías (FNG).
En el FNG actuamos como tu fiador institucional. Esto quiere decir que te respaldamos para que puedas acceder al financiamiento que necesitas, incluso si no tienes una garantía tradicional. Suena bien, ¿cierto?
Imagina que tienes una pequeña empresa de confecciones. Quieres comprar nuevas máquinas para aumentar la producción, pero no tienes una propiedad que respalde el préstamo, ni tampoco un fiador. Acudes a una entidad financiera y te cuentan que el FNG puede respaldar tu crédito. Gracias a esto, logras el préstamo y haces crecer tu negocio.
Accedes al crédito formal con mejores condiciones (tasas, plazos, montos).
Generas más confianza con las entidades financieras.
Y lo más importante: puedes cumplir tus metas sin quedarte estancado.
📌
Acércate a tu entidad financiera de confianza y pregunta por las líneas respaldadas por el Fondo Nacional de Garantías. Ese proyecto que tienes en mente puede hacerse realidad, y no necesitas recorrer el camino solo.